Un café y un beso largo. Una canción de despedida. Silbarle bajito al viento y pedirle explicaciones a la vida. Exigir hechizos benévolos que borren lágrimas perdidas. Robarle minutos al amanecer. Inventar juntos superhéroes y superheroínas. Creer que el amor comienza en el último escalón de tu escalera. En la última mueca de tu sonrisa. En el primer suspiro del día. Despertar abrazada a tus pestañas e inventarme un camino de ida, mano única al infierno de tus caricias. Y así, perseguir el sol eterno que me muestre tus deseos, mientras el ambiente se llene de risas ausentes, como cenizas que nos rodean al caer.
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ExpressAte sin aluciones político-religiosas malintencionadas. Gracias!